Con más de 600 años de historia y más de 200 años de experiencia en turismo, la Región fusiona el clima templado y la naturaleza exuberante con un legado histórico y cultural rico y único, debido a las innumerables influencias de las culturas de los muchos países que, durante siglos, han hecho de Madeira un punto de paso. El archipiélago es un destino seguro, que ofrece un inmenso conjunto de experiencias para todos, desde la naturaleza hasta el mar. Su pueblo es alegre, dedicado y apasionado por sus islas, dispuesto a recibir a quien llegue. Este es el punto de partida para una identidad renovada.
Basada en este mensaje, la identidad visual es más moderna y representa a Madeira tal como es: simple, vibrante y divertida. El logotipo se compone de la deconstrucción del círculo, símbolo asociado a la idea de inclusión y al espíritu de Madeira. Gráficamente, el círculo representa la idea de unión y perfección, pero también y simultáneamente diversidad.
La estrategia de la marca ha contado con la colaboración de Bloom Consulting. La nueva identidad es fruto del trabajo de la agencia creativa BAR y estará presente en todos los materiales de comunicación en la Región Autónoma de Madeira, dentro y fuera de las fronteras.
Para Eduardo Jesus, presidente de APM, la nueva marca Madeira “pretende desencadenar un sentimiento único y poder transmitir nuestro propósito: ¡Hacer que cada persona sienta que pertenece aquí! Este sentimiento de pertenencia… transcrito en la expresión “Belong”, en inglés, es la razón por la que existe la marca. Es mucho más que los beneficios o las características unificadoras de una región. El propósito de la marca es un norte, capaz de unificar a nuestra gente ya quienes nos visitan en torno a una percepción común y lo que nos proponemos ser y hacer”.
Así, el claim “Madeira, tan tuya” se basa en cuatro pilares:
Un lugar donde me siento bien: Con un clima templado todo el año, la Región Autónoma de Madeira es lo suficientemente pequeña como para ofrecer una escala humana, donde nos sentimos cómodos, tranquilos y muy seguros. Al mismo tiempo, logra ser enorme en diversidad, naturaleza y espacio para respirar.
Un lugar donde me siento entre amigos: Esta es una tierra de la que nos sentimos parte, sin importar nuestra edad o nuestros gustos. Un lugar de gente auténtica, feliz y orgullosa de su historia y cultura. Personas que reciben como nadie, que hacen amistades y perpetúan un destino que recibe a los turistas con los brazos abiertos desde hace más de 200 años.
Un lugar donde vivo como un local: Tanto locales como turistas, todos disfrutan de lo que ofrecen las islas: todos los días hay 4 estaciones disponibles y, en un instante, es posible moverse de la montaña al mar o desde el bosque a la ciudad. Existe una enorme riqueza histórica y cultural, que es un lugar común para todos.
Un lugar al que siempre quiero volver: La experiencia turística en la Región tiene una oferta infinita: desde la gente a la naturaleza, pasando por la cultura o la gastronomía, la experiencia nunca será completa. Puedes volver en cualquier época del año, cuando tengas frío, cuando eches de menos o cuando, simplemente, quieras volver a sentirte bien.
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