Los modelos de la familia Dreamliner han estado certificados para operar hasta 180 minutos de una pista de aterrizaje desde su puesta en servicio en el año 2011. El otorgamiento de esta ampliación en la autorización operacional permitirá a las aerolíneas introducir más rutas, una vez que cubran los requisitos que sustenten la necesidad de contar con esta capacidad de operación y reciban el visto bueno de las autoridades reguladoras pertinentes.
“Nuestros clientes están ansiosos por extender su operación con el 787”, dijo Larry Loftis, vicepresidente y gerente general del Programa 787 en Boeing Commercial Airplanes. “Estamos muy complacidos de que se haya otorgado la certificación para esta capacidad operacional que nosotros incorporamos desde un principio en el diseño del avión”.
La posibilidad de ampliar las operaciones ETOPS incrementará aún más la eficiencia del 787, ya que permitirá rutas de vuelo más directas. Con ello es posible ahorrar miles de libras de combustible y abatir las emisiones de carbono.
Hasta la fecha, ya suman 60 los clientes que han ordenado más de 1,030 787s, y Boeing ha entregado 146 Dreamliners a 19 clientes.
El 787 Dreamliner es un avión de doble pasillo muy eficiente que brinda a los pasajeros una experiencia inigualable al volar, gracias a sus ventanillas de mayor tamaño, mejor calidad de aire, menor altitud de presurización en cabina, y mayor humedad relativa.